domingo, 1 de febrero de 2015

Modelos matemáticos y lentes para presbicia y cataratas

La presbicia o vista cansada y las cataratas son dos patologías oculares de gran impacto en la población y, con su envejecimiento progresivo, se prevé que sigan una línea ascendente. Los proyectos e investigaciones para mejorar su diagnóstico y abordaje tienen especial importancia. Un buen ejemplo es el Grupo de Investigación en Optometría (GIO) de la Universidad de Valencia (UV), que coordinará un proyecto europeo de más de tres millones de euros para elevar el diagnóstico y abordaje de estos fenómenos. Este proyecto, denominado Aging Eye, tiene cuatro años de duración y se enmarca dentro de la convocatoria People del VII Programa Marco de la Unión Europea que contempla ayudas para investigadores.
Según ha explicado a DM Robert Montés-Micó, catedrático del Departamento de Óptica de la Facultad de Física de la UV y responsable del GIO, "este proyecto nace de la necesidad de mejorar la calidad visual y, en consecuencia, de vida de los pacientes que sufren el envejecimiento natural del ojo y de patología asociada".
Calidad visual 
Se pretende, en primer lugar, impulsar la eficacia en el diagnóstico de la presbicia y sus soluciones y, además, desarrollar nuevas prótesis oculares que mejoren la calidad visual y el rendimiento de los pacientes a los cuales se les intervenga de cirugía de cataratas. En este sentido, ha recordado que "la cirugía de cataratas es la más practicada en el mundo y requiere de soluciones óptimas y de alto rendimiento".
Las principales líneas de investigación estudiarán fundamentalmente la presbicia, la pérdida de transparencia de los medios oculares y las soluciones mediante prótesis oculares o lentes intraoculares que puedan sustituir el cristalino envejecido. "Se conformarán modelos matemáticos para la reproducción y descripción de la forma del cristalino y, a partir de ellos, crear nuevos diseños de prótesis oculares que mejoren la corrección de la presbicia", ha expuesto Montés-Micó. Para ello, se realizarán pruebas in vivo de las diferentes propiedades ópticas de cristalinos humanos para caracterizarlos matemáticamente y así crear las prótesis oculares sustitutivas de alto rendimiento visual.
Posteriormente, mediante sistemas de óptica adaptativa se simularán en pacientes reales las soluciones encontradas "para conocer in vivo y sin tratamiento previo el rendimiento de las soluciones diseñadas".
Comparar soluciones 
En una siguiente fase se procederá a la evaluación in vitro de las lentes desarrolladas mediante sistemas de interferometría. "Estos sistemas permiten caracterizar cómo son las soluciones diseñadas desde un punto de vista óptico", indica el experto, y añade que "la calidad óptica de la prótesis ocular que va a implantarse es proporcional a la de la visión que posteriormente el paciente tendrá una vez se inserte en el ojo"
Fuente: diariomedico.com